God of War ha sido una franquicia que lleva activa desde al año 2005. Su primera aparición en PlayStation 2 tuvo una buena acogida y esto hizo que Sony Santa Monica desarrollara las entregas posteriores. No ha sido hasta este año 2018 cuando hemos podido saber que es lo que había sido del destino de Kratos. Hemos tenido la ocasión de disfrutar de esta nueva entrega de acción-aventura para PlayStation 4 donde nos hemos encontrado con un Kratos que aparece en unas tierras muy distintas a las ya acostumbradas.
Viajes por la mitología nórdica
Nos encontramos en las tierras nórdicas donde veremos a Kratos que, junto a su hijo Atreus, tienen que llevar las cenizas de Faye, su mujer, a la montaña más alta. En este viaje, que podría haber sido un «paseo tranquilo», acaba siendo muy peligroso, se ven envueltos en problemas con los dioses nórdicos, tendremos que enfrentarnos a muchos monstruos, nos llevaremos algunas sorpresas y acabaremos teniendo una aventura y un final para nada esperado.
La narrativa de God of War es digna de mención y es que vamos a encontrarnos numerosos diálogos, y no solo entre Kratos y Atreus. Así como conversaciones con otro personaje el cual no quiero revelaros por no hacer spoilers y que nos va a contar historia tanto del mundo nórdico como lo que les pasó en el pasado a otros personajes. Llama además mucho la atención que cuando pisamos tierra firme nos dirá que ya nos lo terminará de contar en otra ocasión.
Posiblemente os entren dudas de que hacer si nunca habéis jugado a un juego de la saga, pero os animo a hacerlo aunque no lo hayáis hecho. No vais a tener un resumen al principio de quien es Kratos y todo lo que ha vivido pero si nos contarán ciertos detalles de su pasado en los momentos importantes. Así como también dejarán preguntas sin responder como el saber porqué está en Midgar.
Nuestra gran amiga Leviatán
El sistema de combate es algo que ha cambiado respecto a los anteriores pero sigue siendo igual de espectacular (sobre todo con algunas muertes). No vamos a tener una gran cantidad de armas y es que principalmente vamos a usar nuestra hacha, los puños (sobre todo para aquellos enemigos que son inmunes a nuestra hacha) y un escudo que podemos activar en cualquier momento. Para apoyarnos en todo momento contaremos con la ayuda de Atreus y su arco, además de aquellas habilidades que le vayamos enseñando. A su vez, para algunos puzles será necesaria su ayuda, por lo que nos va a ser imprescindible (a pesar de que no nos llegue a caer especialmente bien en algunos momentos de la historia o durante todo el juego).
El uso del hacha llega a ser de lo más versátil y es que además de poder realizar ataques débiles o fuertes con ella también vamos a poder lanzarla. Esto es muy útil ya que nos permite congelar a los enemigos así como para la resolución de ciertos puzles. Como punto negativo estaría que ahora los combates son un poco más lentos y esto nos va a obligar a estar alerta y sobre todo saber esquivar. Para ello el escudo va a ser nuestro gran amigo y es que en ocasiones si defendemos en el momento justo podemos empujar al enemigo y así empezar el contraataque.
Dominar el sistema de combate es algo fundamental sobre todo dependiendo de la dificultad que hayamos elegido. Aunque si creeis que es demasiado dificil lo que habéis elegido podéis cambiar la dificultad en cualquier momento. Lo más aconsejable es que si tenéis la ocasión de luchar lo hagáis ya que así vais a poder recibir experiencia y de esta forma mejorar las habilidades que usamos en combate.
Los elementos de RPG van a ser los que le den jugo al juego. Vamos a poder subir de nivel y adquirir nuevas habilidades que nos va a permitir mejorar y adquirir nuevas habilidades tanto para ataques cuerpo a cuerpo, a distancia, para el escudo o nuestra ira espartana y a nuestro pequeño carry Atreus. Y, aunque pueda no parecerlo al principio, mejorar lo que puede hacer Atreus nos puede salvar de algunos combates. Además, cuanto mejores sean nuestro movimientos podemos llegar a hacer combos que harán que nuestros enemigos no duren nada.
Algo indispensable para sobrevivir es tener un buen equipo que se puede adquirir en cofres o comprándolo. Además podemos mejorarlo a costa de dinero, materiales así como añadiéndoles gemas que nos van a permitir subir nuestras estadísticas a las ranuras. Cada gema es diferente, nos pueden otorgar diferentes protecciones como por ejemplo que los ataques de hielo nos hagan menos daño. Algunos materiales para mejorar nuestro equipo solo los vamos a poder conseguir hasta cuando podamos explorar con libertad y podemos completar más misiones secundarias. Completarlas puede ser muy beneficioso ya que vamos a conseguir experiencia así como nuevos materiales, pero hay que tener cuidado en donde acabamos ya que es probable que no estemos preparados para ello y los enemigos tengan más nivel que nosotros lo que acabaría con nuestra muerte por un solo toque.
Completando la historia a nuestro ritmo
Durante las 20 horas aproximadas que nos puede durar la historia principal, el juego nos invita en varias ocasiones a que exploremos su mundo todo lo que queramos. Pueda parecer en algunos momentos que el juego nos obliga a aligerar el ritmo pero en realidad nosotros vamos a ser los que marquemos el ritmo. Durante las primeras horas de juego nuestra libertad va a ser poca pero, conforme avanzamos, vamos a poder ver que se nos van desbloqueando diversas rutas a las que podemos ir.
Y una vez que acabemos el juego la libertad será completa y podemos explorar sin problema todos los recovecos en busca de cofres, liberar dragones, y luchar contra las Valquirias, unos de los enemigos más poderosos que nos vamos a encontrar en Midgar. Así que es totalmente recomendado que antes de enfrentaros a ellas vayáis bien preparados y vayáis en busca de aquellos materiales que nos van a permitir hacer las mejores armaduras.
Perdiéndonos en los paisajes
Nos quedaríamos cortos hablando sobre el nivel de cuidado y amor que le ha puesto Sony Santa Monica a God of War. Y es que el apartado artístico sobresale y se ve de maravilla tanto en una PlayStation 4 normal como en una Pro. Sus escenarios, que están cargados de detalles y con una iluminación muy cuidada, nos invitan a explorarlos y perdernos en ellos. No vamos a tener cinemáticas como tal y es que las escenas corren con el motor del juego in-game pero esto no es malo y es que está todo tan bien hecho que podemos empatizar con los personajes y ver como reflejan todo tipo de emociones.
Además, en algunas ocasiones está todo tan bien que no sabremos cuando ha terminado la cinemática y podemos controlar de nuevo a Kratos. En este aspecto por poner una pega pondría que no hay una gran variedad de enemigos, sobre todo se nota en los ogros que su única variación es el elemento al que es afín. Y otra pequeña pega, que seguramente solucionen en algún parche, son los pequeños bugs donde Kratos decide que no quiere ayudar a Atreus y nos va a obligar a salir y volver a entrar en la partida (eso sí las risas no te las quita nadie con estos errores).
Y si lo acompañamos de unos buenos efectos de sonido y una banda sonora bastante ambiental hace que su conjunto sea una maravilla. Vamos a tener batallas muy épicas que no serían lo mismo sin este apartado. Un pega en este aspecto, y quizás sea solo algo personal, serían sobre su doblaje en español. No es para nada malo pero quizás a Kratos le habría pegado otra voz y ya por ser un poco más quisquillosos habría estado bien poder elegir el idioma del doblaje.