Hoy os contamos como han sido nuestras experiencias granjeras en Story of Seasons: Friends of Mineral Town. Se trata de un remake del juego por el mismo nombre que salió en Game Boy Advance en 2003. Esta nueva versión es mucho más amigable para nuevos jugadores y además es la versión más completa del juego. Podéis disfrutar de este juego en diferentes plataformas como PC, Nintendo Switch y desde hace unas semanas en PlayStation 4.
Has obtenido una granja
Nuestra vida en la granja comienza cuando nos mudamos a Ciudad Mineral. Se trata del pueblo donde pasábamos el verano con nuestro abuelo y es él mismo el que nos ha dejado su granja para hacernos cargo. El alcalde de Ciudad Mineral se encarga de rememorarnos estos recuerdos y de preguntarnos si queremos o no hacernos cargo. Es importante que digáis que si ya que si decís que no el juego se acabará y veremos los créditos del juego.
Si aceptamos nuestro destino como granjero o granjera nos espera una vida de sufrimiento durante los primeros años. Aunque, también puede ser el comienzo de nuestra historia de amor con el personaje que más os guste (indistintamente del género). Además, conforme establezcamos amistad con nuestros vecinos del pueblo iremos conociendo sus vidas y los dramas que los atañen.
El poder de la elección
El juego está lleno de decisiones que podrán llevarnos por el buen o por el mal camino. Y es que desde el inicio del mismo nos plantean como queremos que sea nuestro personaje. Nos ofrecen la posibilidad de elegir entre dos modelos de chicos y otros dos de chicas. Esta opción es solo visual y no influye para nada luego en el juego. Aunque, a modo de curiosidad, podemos contaros que el primer modelo del chico es el del protagonista del juego original y el primer modelo de la chica es el de la versión Harvest Moon: More Friends of Mineral Town.
Nuestra siguiente elección será como queremos afrontar el juego o bien en “Modo sencillo” o por otro en “Modo normal”. Durante el primero empezamos con dinero ahorrado, los objetos se venden por más dinero, la amistad es mucho más fácil de subir y tendremos 18 nabos plantados. Si elegís el modo normal entonces viviréis una experiencia un poco más desafiante. Si sois nuevos jugadores, y no tenéis mucho tiempo, no dudéis en poner el “Modo sencillo”.
Tras probar ambos métodos nos hemos quedado con el sencillo y esto no ha significado que ya está todo hecho. Solo te facilita las cosas al inicio y es que, al contar con nabos para vender y con dinero ya ahorrado, vamos a poder comprar nuevos cultivos o animales para nuestra granja. Queda de nuestro lado queda saber como administrar ese dinero o cual es la mejor forma de aumentar nuestras ganancias. Hay que intentar no abarcar mucho al inicio ya que la energía del personaje se esfumará rápidamente. A eso hay que sumarle que el juego avanza diez minutos cada cinco segundos por lo que si tenemos muchos cultivos es posible que en un día no nos dé tiempo a regarlo todo.
Es conveniente que, durante nuestros primeros minutos de juego, nos dediquemos a conocer a los habitantes del pueblo y ver que es lo que podemos hacer en el juego. Es así como vamos a descubrir la casa de los Duendes. Es primordial que os hagáis amigos de ellos y es que podemos pedirles favores. Entre esos favores, y no penséis mal, está el pedirles que nos rieguen nuestros cultivos. De esta forma podemos centrarnos en tener gran cantidad de cultivos y poder tener bastante dinero en relativamente poco tiempo.
Pero, si lo que queréis es sufrir, o jugar sin hacer “trampa” entonces podéis simplemente haceros amigos, pero no pedirles nada a cambio. Tendréis que aprovechar a nuestra amiga la lluvia y también hacer uso de las herramientas. Entre la variedad de las herramientas tenemos las destinadas al cultivo, las herramientas para mejorar nuestras instalaciones o la del cuidado de los animales. Con el uso de las mismas estas van subiendo de nivel lo que nos permite poder llevarlas al herrero y que nos fabriquen mejoras de las mismas. Aunque para poder mejorarlas también vais a necesitar minerales así que de esta forma os toca ir a la mina.
La mina es nuestro mejor y peor aliado. Es nuestro peor aliado porque toda acción que requiera el uso de una herramienta nos costará gastar energía. Si queremos avanzar tenemos que llevar comida y tener hueco para recoger lo que excavemos. Es gracias a esa recompensa que le vamos a coger cariño a la mina, porque además de poder mejorar las herramientas, podemos vender los minerales y sacarnos un buen dinerito. De hecho, os recomendamos que durante la estación del invierno os vayáis a la mina que está en el lago y solo os dediquéis a excavar.
Cuidando animalitos
Si no os gusta cosechar y queréis ganar dinero de una forma más complicada entonces nos queda el cuidado de los animales. Comenzamos sin animales, aunque al poco tiempo nos dan al caballo al que solo podemos mimar. Es importante que subáis pronto la amistad con él para participar en eventos como el Derby de Primavera. Subir la amistad con nuestros animales siempre va a requerir que les hablemos, si es posible cepillarlos (si hemos comprado el objeto) y tenerlos bien alimentados. Cuanta mayor sea la felicidad de los animales más probable es que nos proporcionen ingredientes de mejor calidad. Por ejemplo, si nuestras gallinas tienen bastante felicidad será más probable que suelten mejores huevos.
La cantidad de animales que podemos tener en la granja es limitada hasta que no vayamos ampliando las instalaciones. Es por ello que lo recomendable es que tengáis variedad de animales para ir subiendo la amistad con ellos y que estos puedan participar en eventos. Los eventos son bastante variados y van desde carreras de caballos hasta tener que lanzarle un frisby a nuestra mascota. Y sí, en Story of Seasons: Friends of Mineral Town podemos tener mascotas en nuestra granja. Para poder tenerlas nos lleva un tiempo y es que tenemos que hacerle ofrendas a la Diosa de la Cosecha para que nos desbloquee al NPC que los vende. Durante el primer año es bastante probable que no tengáis dinero para comprar alguna mascota pero no os desaniméis.
Mejorando nuestras instalaciones
Paciencia sobre todo, lo que hay que tener es paciencia al inicio del juego o mejor dicho durante el primer año. Conforme pasen las estaciones, además de entender mejor el juego, se nos van a ir ofreciendo nuevas posibilidades para nuestra granja como la posibilidad de tener un suelo mejor y por lo tanto un mejor cultivo. Esto va a suponer que nuestros cultivos se puedan vender por mucho más dinero. Así que si unimos eso al paso del tiempo en relativamente poco tiempo vais a tener bastante dinero ahorrado con el cual poder comprar mejoras para vuestra granja.
Dado que al fin y al cabo tu puedes hacer lo que quieras en el juego, por que realmente no hay un objetivo, este título puede llegar a abrumar un poco. Por ello, y como recomendación, os diríamos que vuestro objetivo sea obtener todas las mejoras de la granja. Para poder mejorar las instalaciones vamos a necesitar sobre todo madera y piedra, por lo que cada vez que podáis podéis ir recolectando y guardando en vuestra casa esos materiales. De esta forma hacemos un 2×1, subimos el nivel de las herramientas y por otros conseguimos los materiales. Una vez obtenidos solo tenemos que ir a hablar con Gotts y que empiece a mejorar la casa. Suele tardar varios días en hacer la mejora pero tras hacerla veremos el resultado.
La primera mejora nos va a desbloquear una utilidad bastante buena como es la cocina. Con ella vamos a poder preparar recetas con las cuales podemos recuperar la energía de nuestro personaje. Tenemos varias formas de aprender estas recetas, como experimentando con los ingredientes o viendo la tele cada martes. Eso sí, para realizar algunas recetas necesitaremos comprar utensilios de cocina como las ollas. No todos los objetos estarán disponibles desde el inicio y será conforme avancemos que el propio juego nos notificará de los nuevos elementos que podemos comprar en el bazar.
El bazar es un sitio que visitaremos frecuentemente y es que también es el lugar donde podemos comprar las semillas para nuestros cultivos. Aunque no es el único sitio porque al lado del puerto también podemos comprar semillas exclusivas que se pueden vender por bastante dinero, pero tardan bastante en crecer. Cada comercio tiene sus horarios y días cerrados así que aseguraos que cuando visitéis alguna de las tiendas lo hacéis en un momento oportuno. Cuesta un poco acostumbrarse a los horarios aunque se pueden revisar en cualquier momento tanto en el mapa que llevamos con nosotros como en el cartel al lado de cada tienda.
Un cambio bastante refrescante
Aunque por lo general nos encantan los juegos en pixel art hay que reconocer que el nuevo diseño 3D le queda bastante bien a este juego. Han sabido coger la esencia de lo que tenía el original y añadirle nuevos toques y detalles que quizás no tenía el original o que no se apreciaban. Estos cambios son notables sobre todo en la jugabilidad ya que han facilitado ciertos aspectos a los usuarios. Por ejemplo, ahora en nuestra casa partimos ya con un armario en el cual guardar las cosas. Y si nos fijamos en el rendimiento en PlayStation 4 la verdad es que ha sido bastante bueno, tiempos de carga bastante normalitos y no ha habido ningún problema ni cierre inesperado.
Respecto a su banda sonora tenemos luces y sombras. No hay mucha variedad, sobre todo cuando estamos en el exterior y es que vamos a tener un tema por cada estación del año. Y si llueve, en el exterior no habrá música solo los efectos de sonido. Así que es bastante probable que acabéis tarareando alguna canción del juego y a la larga aborreciendo dicha canción. Y para aquellos que pregunten en que idioma está el juego podemos confirmar que todos sus textos están completamente traducido al español.