Hace unas semanas que nos llegaba The Alliance Alive a nuestro mercado, lo último distribuido por FuRyu /Atlus y desarrollado por Cattle Call. Para los que se lo pregunten, si, es la misma compañía que desarrolló The Legend of Legacy, su anterior juego de Nintendo 3DS. Podemos decir que el título que hoy se analiza es el sucesor espiritual de The Legend of Legacy, hereda muchos detallitos y comparten algunas cosas, por ejemplo, de su sistema de combate.
En búsqueda de la alianza
Como se puede ver en las imágenes, el juego se encuentra totalmente en inglés, por lo que necesitamos un mínimo de conocimientos si queremos enterarnos de su historia. Durante el desarrollo de las escenas de historia (las cuales no están dobladas) podemos darle a la pausa, saltarlas o volver a reproducirlas desde su comienzo, un detalle bastante curioso para los más despistados.
Nuestra partida comienza contándonos que hace 1000 años, los Daemons dividieron la tierra con la Gran Barrera. Ellos dividieron el mundo en reinos, y crearon leyes para mantener a cada reino bajo control. Desde ese día, el mundo no ha visto el cielo azul. Como la elite mandante, los Daemons son servidos por sus inferiores, los Beastfolk. Es normal que vean a los Humanos como la raza más inferior de todas y por ello tendremos que cambiar eso.
Aunque empecemos con ciertas dudas acerca de cómo funciona la ambientación y el mundo de The Alliance Alive, conforme avancemos en la historia, iremos formándonos en la cabeza los sucesos gracias a los múltiples puntos de vista que podremos ver, en los primeros compases de la historia de diferentes grupos de personajes, lo cual hace ameno el desarrollo de esta primera parte.
Evolucionando en batalla
Un gran cambio respecto a The Legend of Legacy es que ahora en combate podemos tener a seis miembros del equipo, por lo que quieras o no, las batallas se hacen un poco más fáciles al poseer más turnos. Podemos decir que los personajes no tienen un rol fijado. Obviamente, entran en nuestro equipo con ciertas habilidades aprendidas y equipación, pero podemos cambiar y por ejemplo poner a casi todos con arco si nos gusta. Este es uno de los puntos buenos para la personalización de los personajes que se une a la vez, con el hecho de que no hay niveles.
Conforme realicemos acciones con un tipo de arma en concreto podremos aprender más habilidades de dicho tipo. A su vez, nuestros SP y HP se irán incrementando gradualmente (será una sorpresa que tras el combate nos digan que nuestro personaje ha aumentado su vida máxima).
El “problema” que puede tener este título es que posee un sistema de habilidades un tanto único que hace que fácilmente pueda echar para atrás a muchos fans del género, por no comprender al 100% cómo funciona. Por poner de ejemplo hablaremos de la mejora de las habilidades. Estas no se basan estrictamente en el típico parámetro de fuerza, sino que a su vez posee sus propios parámetros como es Attack, Guard y Support. Dependiendo de en qué formación esté dicho personaje (si está en primera fila recibiendo un plus de ataque o atrás para tener uno de defensa por poner unos ejemplos) aumentaremos un parámetro u otro de la habilidad que hayamos usado. Hasta que no hayamos echado unas cuantas horas no nos daremos cuenta de cómo funciona, lo cual puede frustrar rápidamente (aunque si estás leyendo este análisis ya tienes más ventaja que yo).
Pero, ¿qué pasa si nos matan en combate? Ocurrirá seguramente, pero no pasa nada. Si no vamos tan mal en combate podemos curar (usar la habilidad normal de curar, no una especial de resucitar ni nada) a nuestro caído para que vuelva a darlo todo. Pero habrá una consecuencia, su vida máxima se verá reducida y para eso tendremos que descansar. Aunque si no te va tan mal no hay mucha complicación, el nivel de dificultad del juego (al menos en mi experiencia) no es tan elevado como para tener que curarnos cada dos por tres, incluso el juego te cura tras cada combate para que vayamos más relajadamente. Aunque como es normal habrá enfrentamientos opcionales que si no vamos bien preparados nos zurrarán, pero bien, así que hay que tener cuidado donde metemos a nuestro personaje.
Antes hemos nombrado la formación, y ya que es un punto importante a tener en cuenta en nuestras estrategias, el juego nos da la oportunidad de crear las nuestras propias, así personalizamos aún más si nos apetece nuestra experiencia en el juego.
Por si fuera poca la variedad de habilidades que puedes aprender de un tipo de arma (que luego, a la hora de la verdad, usarás la más fuerte o la que tengas más mejorada, sin fijarte bien en otros detalles que hace única a esa habilidad, porque no hará falta) tenemos el estado Ignition. En este estado, podemos realizar un golpe final que desencadenará el poder oculto de las armas equipadas. Solo existe un pequeño problema, tras usarlo dicha arma se destruirá, por lo que, si el combate sigue, más nos vale tener una segunda arma equipada. Cuando avancemos en la historia nos darán facilidades para reparar estas armas y, por tanto, hacer estos ataques con un poco más de tranquilidad.
¡Ah! Se me olvidaba. Al ganar combates iremos recibiendo Puntos de Talentos para poder canjearlos por mejoras de los personajes. Por ejemplo que al usar habilidades de un cierto tipo de armas gastemos ‘X’ SP menos, o que podamos descubrir más rápidamente nuevas habilidades, así como más facilidad para subir los parámetros de las habilidades usadas. Siempre estaremos mejorando nuestros personajes, por lo que cada combate por insignificante que parezca, puede ser un pasito para ser los mejores.
Un mapamundi muy muy grande
Una de las cosas que solemos echar de menos de los JRPG clásicos es el poder viajar por el mapamundi, en este podremos. Aunque no todo será bueno, ya que estará un tanto vacío (al menos en mi opinión), y no digo de entradas a otros escenarios o puntos de interacción sino de enemigos incluso.
Una de las pocas cosas por las que tenemos que estar atentos durante las travesías por los mapas serán unos puntos brillantes que son “monedas” que nos servirán unas para huir/reintentar combates y otras para canjearlas por objetos.
Torres aliadas
Dependiendo de en qué parte del mapamundi estemos, unas torres nos apoyarán en las batallas. Algunas harán que se reduzca la defensa del enemigo, o incluso un ataque de apoyo que nos vendrá muy bien. De esta manera puede que algunas partes del mapa sean mejores que otras a la hora de entrenar a los personajes y sus habilidades. Estas alianzas a su vez desarrollarán mejores habilidades para nuestro favor conforme avancemos.
Llegados a un punto de la historia podremos construir más torres en unos puntos concretos del mapa, y, tras reclutar a ciertos NPCs le daremos autoridad para que lleven dichas torres. Podemos elegir qué tipo de torre queremos construir (dependerá también de los NPCs que tengamos disponibles).
Sombras en el cielo
El apartado artístico recuerda claramente al de su predecesor espiritual, por lo que a quien no enganchará este apartado en dicho título, en este no será diferente. Debido a la ambientación e historia del juego, viviremos en un mundo un tanto apagado y desolado, lo cual refleja bastante bien la elección de colores de los escenarios, aunque tendremos algunas excepciones más coloridas.
La música está compuesta por Masashi Hamauzu y sin llegar a ser muy recordable, ambienta correctamente el mundo mecánico y diverso de The Alliance Alive. A pesar de tener en cuenta el tipo de historia no creo que sea suficiente para que en ocasiones sentamos una falta de cariño a la hora de montar los escenarios. Dudaremos muchas veces si vale la pena investigar cada rincón o pasar directamente a la historia.
