Hoy os traemos el análisis de The Legend of Nayuta: Boundless Trails, el spin-off de la saga Trails (o Kiseki en Japón) que nunca llegó a ver la luz en Occidente. Actualmente está disponible en PC a través de Steam, Nintendo Switch (que es la versión que hemos analizado en esta ocasión), y PlayStation 4. Como estamos acostumbrados ya, esta entrega desarrollada por Nihon Falcom solo podremos disfrutarla en inglés. Todavía rezamos para que decidan traducir sus juegos a nuestro idioma.
Lanzado originalmente para PlayStation Portable en verano de 2012, se trata de un RPG de acción muy parecido a otra saga de la compañía, Ys. Este título, desarrollado por Nihon Falcom, trae lo clásico del género: diferentes mundos/niveles, magia, equipamiento, algo de plataformeo, dentro de un planteamiento sencillo.
¿Quiénes somos?
La historia de The Legend of Nayuta: Boundless Trails se inicia con Nayuta (¡que sorpresa!), que vive en su tierra natal, Remant Isle, un lugar tranquilo y un tanto aislado del resto del mundo. Después de una lluvia de estrellas hace tiempo, se han estado encontrando unas piedras llamadas “Star Fragments”, que emitían una luz con la que la gente puede ver el mundo de “Lost Heaven”.
Nuestro protagonista es un entusiasta de las estrellas y siempre ha sentido la necesidad de descubrir qué hay más allá del horizonte, pues la gente cree que el mundo es plano y finito. Un día cae un objeto del cielo, desbloqueando unas ruinas muy cerca de la orilla de la isla. Tras visitarla se encuentra con una enigmática chica tirada en el suelo con sus perseguidores habiéndole robado algo, al parecer, muy importante. Resultando con la visita de Nayuta al misterioso mundo que siempre había querido conocer.
Una vez dentro de este otro “mundo” descubrirá más personajes con desconocidas intenciones, todo resultara ciertamente confuso, tanto para el personaje como para el jugador. A pesar de no ser un título como otros de la saga, con una excesiva cantidad de personajes, los pocos que hay, tienen sus giros de guion, aunque nada fuera de lo ya visto en el género.
¿Cómo se estructura el juego?
Algo que suele pasar, en los juegos de Nihon Falcom, es que veremos fácilmente una estructura que se repite en el avance del jugador por la historia. Utilizando como base de operaciones la isla del protagonista, partiremos a las diferentes islas que están situadas alrededor. Cada una de ellas está dividida en varios niveles, un nivel doble y un encuentro con un jefe.
Sinceramente, es un juego muy disfrutable si quieres simplemente echarle un ratito cada día. Los niveles son bastante cortos y sencillos. En cada nivel, el jugador podrá obtener hasta tres estrellas. La primera de las estrellas se obtiene simplemente por pasarse el nivel, la segunda por romper tres cristales que se reparten por el nivel junto a un cofre del tesoro. Y la tercera, la más curiosa y diferente, por completar un objetivo que varia según el nivel: derrota a 25 enemigos con magia, salta menos de cinco veces, no te caigas más de 3 veces, etc. Cada seis estrellas que obtengamos, nuestro maestro de combate, nos otorgará alguna novedad, ya sea una habilidad nueva, o alguna pieza de equipamiento.
Será muy gratificante ir completando los niveles lo máximo que podamos conforme avanzamos, aunque ya advertimos que tendréis que esperar para poder conseguir la segunda estrella, ya que quizás, no tengamos el poder suficiente para alcanzar esa deseada zona.
Uno de los puntos más curiosos respecto a la variedad de niveles es que dependiendo en que estación estemos (se cambia con un simple botón), varía ligeramente el nivel. Desde niveles con lava, hasta suelos resbaladizos en invierno, pasando por suelos venenosos. Conforme avancemos en la historia iremos desbloqueando las segundas, terceras y cuartas estaciones para los niveles.
¿Espadas y magias?
En cuanto a mecánicas jugables no es un juego que digamos innovador. Viniendo de una consola portátil, sorprende como han sabido aprovechar los botones para varias aplicaciones, tanto una pulsación, como dejar pulsado el botón. Tenemos lo típico de saltar y golpear, y luego disponemos de nuestra compañera de viaje, Noi, para ejecutar poderes mágicos. Existe gran variedad de magias que iremos obteniendo gracias a la historia o a mini-retos en los diferentes niveles. Conforme vayamos usando estos hechizos, subirán de nivel y serán más poderosos. Con un botón vamos alternando entre los cuatro que podremos llegar a tener, para dar algo de versatilidad en los combates. No existe los clásicos puntos mágicos, simplemente deberemos esperar a que se rellene una carga del hechizo, pero podremos ayudar esta subida, golpeando con la espada a los enemigos.
Durante los niveles nos toparemos con ciertas mecánicas que no podremos utilizar hasta que no hayamos avanzado por la historia, como puede ser, el utilizar una especie de ganchos en el aire, romper objetos gigantes, o utilizar una barrera mágica para poder protegernos de los ataques y terrenos peligrosos. En algunas ocasiones nos tocará revisitar para ir obteniendo todo en los niveles anteriores. Estos poderes hace que tengamos que pensar un poquito en ocasiones y observar bien, si queremos saber como poder llegar a algún punto concreto del mapa.
Nuestro equipamiento (y el de nuestra compañera) podemos actualizarlo de varias formas: encontrándolo en los cofres de los niveles, como recompensas con nuestro maestro de combate o comprándolo en la isla. También haremos de buenos samaritanos ayudando a nuestros amables vecinos en diversas misiones secundarias. No obtendremos nada fuera de lo normal pero vendrá bien para conseguir dinero, ingredientes o incluso libros de recetas.
En los niveles no solo meteremos espadazos nosotros, si no que recibiremos lo nuestro si no vamos con cuidado. Para eso está la cocina, la “única” manera de curarnos voluntariamente. Utiliza un sistema de recetas que se van desbloqueando conforme obtenemos ingredientes y adquiramos libros de recetas, aparte de la curación de cierta cantidad de vida, tendrá efectos beneficiosos como subida del ataque y de la inteligencia. Siempre es recomendable tener platos cocinados antes de enfrentarnos a un jefe, y por suerte, conocemos la estructura del juego y podemos anticiparnos para estar bien preparados.
¿Y un museo?
Si, has leído bien, en la isla tendremos un museo. Además, seremos nosotros los encargados de ir llenándolo de diferentes especies. Simplemente tendremos que ir recolectando estos objetos por los niveles y llevarlos al mostrador. Nos darán dinero dependiendo de lo que hayamos recogido, por lo que también se convierte en una buena manera de obtener fondos. Conforme vayamos llenando el museo, podemos entrar en las diferentes salas y ver las especies que hemos recogido en los diferentes ambientes, como si se tratara de una exposición natural.
¿Y luego qué?
The Legend of Nayuta: Boundless Trails se compone de ocho capítulos, siendo este último una especie de epilogo donde iremos a por el “final bueno”. Hecho parecido a lo que ocurre en Dragon Quest XI. Una vez que completemos estos ocho niveles y nos pasemos el juego, pensaremos que la cosa puede acabar aquí, pero no. Si queremos conseguirlo todo tendremos que pasar si o si por una segunda partida, ya que solo será aquí que obtendremos nuevas misiones secundarias, nuevos niveles, nuevas recetas, equipación a conseguir entre otras cosas. Así que para aquellos jugadores que han disfrutado del viaje, les alegrará saber que no termina con los créditos.
¿Qué trae nuevo?
Aunque podríamos decir que ya es suficiente con que vayan a traer el título oficialmente a Occidente, siempre está bien que añadan algo de contenido, aunque no sea mucho en esta ocasión. Aparte de estar en alta definición, tenemos nuevas ilustraciones y retratos para los diálogos, además de haber incrementado a 60 frames por segundos. El rendimiento que hemos experimentado en el modo portátil de Nintendo Switch es bastante satisfactorio, por lo que no hay muchas pegas para disfrutarlo en esta consola. Lo único «problemático» ha sido el leer unos textos que debido al contorno y el fondo que tenían, hubiera estado bien algo más de resolución.
El lavado de cara se nota si lo comparamos con la versión original, aunque tampoco se trataría de un remake, por lo que se puede notar que no es un juego de la actual generación ni mucho menos. Aun así muy disfrutable y más con la calidad de banda sonora característica de Nihon Falcom, llamativa y envolvente.