Con el paso del tiempo la humanidad ha ido cambiando sus creencias dando lugar a diferentes mitos y leyendas. Algunas todavía persisten en la actualidad pero muchas otras se han perdido. El equipo de Morteshka, unos amantes de los mitos, historias y cosas misteriosas querían un juego que incluyera todo eso.
Por ello basándose en la mitología Komi y en varios libros como «Wondrous Antiquities of Riphea» o «The Legacy of Kama Chud» han dado como resultado The Moosman. Este juego de exploración había salido previamente en Steam en febrero de 2017 y un año después ha aterrizado en Nintendo Switch.
Viendo lo oculto
Tamos el control del Mooseman un chaman que tiene la capacidad de ver todo lo que está oculto para los mortales. Nuestro viaje consistirá en viajar a las misteriosas tierras de las tribus Perm Chud a través de las tres capas de este universo: el Mundo Inferior donde residen los espíritus de los muertos, el Mundo Medio donde moran los hombres y el Mundo Superior donde residen los dioses. Entre esas capas moran muchos espíritus que nos harán nuestro viaje por la oscuridad un poco más complicado.
Resolviendo puzles
Nuestro protagonista es capaz de ver entre el mundo de los espíritus y el mundo de los humanos y esto nos abre diferentes posibilidades. Cuando tenemos activada la visión hará que veamos a los espíritus y que en ocasiones podamos interactuar con ellos para resolver algún puzle. Por ejemplo, una simple roca puede ser un espíritu que nos puede seguir y si la situamos en el lugar adecuado podemos subir a través de ella para poder continuar nuestro camino.
No todos los espíritus son buenos y es por ello que deberemos aprender cuales lo son y cuales no. Es por ello que es conveniente que algunos espíritus sepan que podemos verlos o bien ocultando nuestra visión u ocultándonos nosotros en alguna parte. Si estos espíritus nos descubren y llegan hasta nosotros, habrá que volver a continuar desde el último checkpoint (fácilmente reconocibles ya que se presentan en forma de Totem).
Cuando avancemos un poco más en el juego veremos que nuestro protagonista adquiere otras habilidades como poder evitar golpes. Por lo general sus puzles son sencillos de resolver y no nos costará nada avanzar.
Encontrando el lore
La historia es el pilar fundamental en The Moosman y será nuestro objetivo ir comprendiendo la historia que se nos revela conforme vamos avanzando. La historia se va aplicando también conforme vamos pasando por los Totems de los escenarios. Como curiosidad, tenemos todos los mitos accesibles desde el inicio en el menú pero no los vamos a poder entender hasta descubrirlos ya que están en el idioma Komi-permio.
No es complicada de entender y además se puede consultar desde sus menús en cualquier momento, pero es mucha información en inglés y con palabras poco habituales. Para incentivarnos a que exploremos sus escenarios hay ocultos unos artefactos, que son unos símbolos brillantes, que contienen información extra. En cada zona podemos encontrar uno o varios por lo que antes de acabar es recomendable pararse a buscar aunque luego podemos revistar cualquier pantalla en busca de lo que nos hayamos dejado.
Interfaz poco intuitiva
The Mooseman destaca mucho por su estilo en 2D minimalista. Las paletas de colores para los escenarios están muy bien elegidas mostrándonos en cada fotograma un perfecto fondo de pantalla. Esto junto al parallax de las diferentes capas que componen el paisaje, hace que nuestra experiencia visual sea más notaria.
En nuestra experiencia jugando hemos encontrado algunos defectos en su interfaz que la hace un poco intuitiva y también tiene algunos fallos. Por ejemplo cuando estamos navegando por los símbolos encontrados o las historias es difícil saber en qué objeto estamos ya que los colores están invertidos, si el objeto no aparece resaltado estamos sobre ese.
Otro fallo con el que nos encontramos es que si está habiendo una narración de la historia podemos abrir el menú de símbolos o mitos y el texto aparece por debajo de lo que nos están contando. Son pequeños fallos que, aunque no molestan para jugar, están ahí y a pesar de que el juego ha sido portado a Nintendo Switch, y seguramente son errores conocidos aun no se han solucionado.
Hay que destacar su apartado sonoro el cual es bastante ambiental e instrumental que tratan hacer nuestro viaje mucho más inmersivo y trasladarnos hasta el lugar que estamos viendo ya que se adapta la música a la perfección. Son pocas canciones pero son las justas para cada escenario y para ayudar en su integración tiene unos buenos efectos sonoros. Su doblaje también es muy bueno, el cual para sorpresa no es en inglés, esto nos permite adentrarnos más en la historia ya que así parece como si un nativo fuera el que nos está narrando la leyenda.