Análisis – Dead Cells

Análisis
9

Sobresaliente

Ya tenemos disponible desde este mes un juego de plataformas inspirado en Castlevania con mecánicas de roguelike y que posiblemente hayáis visto ya. Se trata de Dead Cells un juego desarrollado y publicado por Motion Twin que tras haber estado un año de acceso anticipado en PC ya está disponible en esta plataforma anteriormente mencionada, Xbox One y PlayStation 4. Para Nintendo Switch habrá que esperar hasta el 17 de agosto para que esté disponible.

Hemos tenido la suerte de jugar su versión anticipada en Steam, y también ahora en PlayStation 4, por lo que hemos podido ver como ha ido evolucionando y mejorando todo este tiempo hasta su lanzamiento definitivo.

Descubriendo la historia

Tomaremos el papel de un cuerpo de células que toman el control de un cadáver en una mazmorra. No sabemos nada de su historia, nada de dónde estamos, ni qué criaturas nos esperan. Si queremos conocer algo más tenemos que encontrar pistas en los escenarios: ya sea examinando una puerta, una alcantarilla de la que provienen sonidos extraños, examinando una cama o hablando con los seres que habitan allí.

Realmente la historia es algo muy secundario en este juego, pero está bien que nos hagan descubrirla si es lo que queremos. Es otra forma de recompensar el que queramos explorar cada rincón que existe en las mazmorras del juego.

Mata, Muere, Aprende y Repite

Matar, morir, aprender y repetir van a ser nuestras acciones básicas durante toda nuestra travesía mientras exploramos las mazmorras y luchamos contra todo tipo de criaturas. Nuestro protagonista puede equiparse un arma principal en cada mano así como dos artefactos. Al principio comenzaremos con una espada y podemos elegir si queremos llevarnos también un escudo y un arco. Hay una gran variedad de armas y cada una de ellas tiene diferentes características y habilidades pasivas que nos pueden ayudar bastante según nuestro estilo de juego.

Hacer una buena build es importante por lo que hay que saber hacer la combinación perfecta si queremos sobrevivir (al menos un poco más). Pero, como en todo comienzo, progresar cuesta al principio pero a medida que derrotemos enemigos podemos conseguir oro, para comprar nuevas armas en las tiendas que puede haber en las mazmorras, recolectar planos, que nos permiten desbloquear nuevas armas o artefactos, y acumular células que esperan ser canjeadas. Estas últimas son bastante importantes ya que nos permiten desbloquear nuevas armas/artefactos, mutaciones, así como mejoras permanentes.

Tenemos una barra de vida que se puede ir aumentando con las bonificaciones que podemos encontrar en los escenarios. Estas nos permiten también que nuestras armas sean más efectivas contra cierto tipo de enemigos. Conforme progresamos por las diferentes fases veremos que se va complicando la cosa, con enemigos más duros o que incluso podemos tener maldiciones que harán que los enemigos nos hagan más daño e incluso acaben con nuestra vida de un toque.

Además de estas mejoras temporales también tenemos mejoras permanente que se pueden adquirir entre fase y fase a cambio de células. Estas nos permiten, por ejemplo, poder conservar más oro al morir o tener más pociones. También hay otras mejoras llamadas mutaciones que nos permiten tener, solo una vez una vida extra, o hacer más daño con artefactos, entre otros variados efectos. Conforme se avanza podremos acceder a nuevos servicios en los que podemos gastar las células. Hacernos la vida más “fácil” en el juego dependerá de nosotros y cómo queramos gastar las células conseguidas .

Aguantar todo el camino hasta el malo final no es una tarea fácil y, si al final nuestro medidor de salud se acaba por completo, nos tocará volver empezar desde cero, las salas se volverán a generar, perderemos todo nuestro equipo así como las mejoras conseguidas (dile adiós a las células también). Estamos ante un título bastante desafiante pero que la vez genera adicción porque en cada intento podemos gastar las células, lo que significa una pequeña mejora más para poder conseguir la victoria.

En Dead Cells no hay un camino único para llegar a su final y es que, con la obtención de las runas (las cuales están algo ocultas) podemos desbloquear nuevos lugares a los que previamente no podíamos llegar. Las runas permiten que nuestro protagonista desarrolle nuevas habilidades como poder saltar entre paredes o romper muros. En ocasiones se requiere la obtención de otra previamente para poder llegar a esta nueva.

La velocidad tiene recompensa

En cada bioma, fase, mazmorra o como queramos llamarlo tenemos unas puertas que solo podemos abrir si llegamos antes de que este tiempo se cumpla. El juego también quiere premiar a los que tratan de avanzar rápidamente sin pararse demasiado en explorar o en matar enemigos. Si somos capaces de llegar, y abrir la puerta antes de que el tiempo se acabe, podemos conseguir buenas recompensas como bastantes células, dinero, bonificaciones y en ocasiones algún patrón o arma.

El juego siempre nos propone cosas conforme avanzamos y una de ellas son los desafíos diarios. Estos nos ponen como recompensa nuevas armas o artefactos a cambio de que los completemos una cantidad de veces al día. Cada día estos desafíos son diferentes así que os recomendamos que aprovechéis para completar más veces aquellos que os resulten más fáciles porque os acabará mereciendo la pena el tiempo invertido.

Desafiando a los jefes

Si el juego ya es bastante desafiante sin ellos pues ya os podéis imaginar como se llega a complicar cuando tenemos que enfrentarnos a los jefes que hay en Dead Cells. Los combates contra ellos son bastante duros y es recomendable llegar con buenas mejoras, mutaciones, beneficios y armas/artefectos equipadas.

Cada jefe siempre tiene sus patrones que se van complicando a medida que le vamos bajando la vida por lo que nuestras posibilidades de sobrevivir la primera vez que nos enfrentemos a ellos son bastante bajas. Aún así, para hacerlo aun complicado, conforme nos pasamos el juego podemos acceder a una serie de puertas que nos aguardan nuestros peores temores (por si quieres complicar el juego un poco más).

Variedad y cuidado

El diseño pixel art de Dead Cells es algo que ha cuidado mucho Motion Twin y que sobre todo se puede ver en sus biomas bastante diferenciados. Cada uno de ellos tiene sus tipos de enemigos y particularidades que harán que nos pensemos antes de entrar si queremos ir a esa zona o no. Se agradece sobre todo que haya esta variedad y no encontremos ni escenarios ni enemigos reciclados.

Nuestra versión en una PlayStation 4 normal se ha comportado bastante bien en la mayoría de las ocasiones pero ha habido otras en la que hemos notado un bajada de frames, que no ha supuesto peligro alguno dado que se ha recuperado la tasa rápidamente. Salvo esto no ha habido ningún problema ni cierre inesperado.

La banda sonora es bastante atmosférica con melodías que acabaremos tarareando conforme avancemos por las fases. Aunque dado el estilo de juego que es, será normal que después de unas cuantas partidas, nos acabe siendo repetitiva (pero en el buen sentido).

Positivo

  • Bastantes horas de juego aseguradas gracias a todo lo que podemos desbloquear y a sus desafíos diarios.
  • Sistema de combate rápido y agil que acabará siendo bastante viciante y hará que las horas pasen volando.

Negativo

  • En alguna ocasión hemos experimentado una bajada de frames que se ha recuperado al poco tiempo.

Resumen

Dead Cells puede ser único cada vez que juguemos ya que su generación procedural intentará que esto se cumpla. Esto también es gracias a la gran variedad de combinaciones que nos permiten formar un buen equipo y adaptarlo a nuestra forma de juego. Casi todos los juegos tienen un final pero con este título tenemos bastantes horas de juego aseguradas sin contar que podemos realizar cada día un desafío diferente. Es bastante recomendado para todo tipo de jugadores ya que es bastante divertido, viciante y recompensa a aquellos que son persistentes.

9

Sobresaliente